Una conocida vecina del barrio de San Andrés, en Barcelona, aparece muerta en su domicilio. Nada fuera de lo común, o sí, porque el rumor en el barrio indica que un pretendiente que encontró en internet le ha sacado todo el dinero. La agencia de detectives Hernández, también del barrio, se debate entre su propio equilibrio y la búsqueda del escurridizo novio.