Libertad es la novela que cierra la Trilogía Africana de Jakob Ejersbo. Christian, hijo de una pareja danesa que vive en Tanzania, entabla amistad con Marcus, un niño negro pobre. Su amistad se fortalece mientras viven experiencias intensas en un mundo de contrastes y conflictos, donde la enfermedad y la muerte están presentes y el alcohol fluye sin control. A medida que crecen, su amistad desafía los límites entre ser blanco y negro, intensificando el conflicto entre sus identidades en Tanzania. Basada en las vivencias infantiles del autor en África, esta novela ofrece una visión cruda y realista de la vida de los expatriados europeos y una crítica feroz, pero tierna, de los recuerdos más personales de Ejersbo.