La pintura muestra un majestuoso Pegaso con alas extendidas, elevándose contra un remolino de colores brillantes. Rodeado de otros caballos voladores, la escena captura una sensación de movimiento, mito y libertad. Las pinceladas y los tonos crean una visión onírica de la criatura legendaria. Óleo, lienzo. Firmado. Barnizado.
50x70x2 cm