Una alegre pintura primaveral del centro de Chicago, con la icónica torre del reloj del edificio Wrigley elevándose sobre el centro de la ciudad lleno de tulipanes. Flores rojas, amarillas y blancas estallan en color, suavizando el imponente horizonte y aportando calidez al paisaje urbano. Con tonos pasteles y un cielo despejado, esta obra captura la alegría de la llegada de la primavera a una gran ciudad, llena de movimiento, vida y belleza inesperada. Óleo, lienzo. Firmado. Barnizado.