PIPA SAVINELLI - UNA GRAN HISTORIA

En 1881, Achille Savinelli Sr. expuso en la Exposición Industrial Italiana, precursora de la actual Feria de Milán. Su iniciativa demostró un instinto emprendedor que se transmite claramente en la familia, incluso hoy en día. En enero de 1890, Carlo, el hijo de Achille Savinelli, tomó las riendas y dirigió la tienda durante más de 50 años. Gracias a su innato instinto psicológico, logró cultivar excelentes relaciones con sus clientes, a quienes siempre supo recomendar los productos más adecuados, adaptando su talento para satisfacer las demandas de cada uno. Cuando Achille Jr. regresó de la guerra, comprendió que la comercialización no era suficiente, así que decidió dejar el taller paterno y comenzó a producir sus propias pipas. Fue una decisión muy importante para el joven Achille, dispuesto a continuar y enriquecer la tradición familiar de Savinelli. Su decisión se basó en un hecho: las pipas más vendidas en Italia en aquel entonces se fabricaban en el extranjero, mientras que en Italia se cultivaba el brezo de mejor calidad. Este punto le inquietó tanto que decidió iniciar su propia producción de pipas de alta calidad, en una época en la que todos los demás fabricantes italianos producían en masa pipas de baja calidad y de mala calidad. Tenía una enorme confianza en su capacidad para producir un producto de calidad, lo que, unido al orgullo nacional, resultó ser un éxito. Se dedicó por completo al desarrollo de la empresa y, con la ayuda de sus mejores amigos, Amleto Pomé y Mario Vettoruzzo, puso en marcha el nuevo negocio en el distrito de Varese, en el noroeste de Italia. Hoy Achille Jr. supo combinar imaginación y buen gusto, logrando una pureza de línea de la que se sentía justificadamente orgulloso. Es su espíritu el que dota de personalidad a todas las pipas Savinelli: un agradable equilibrio entre forma y función. Su imaginación y refinamiento han sido, sin duda, transmitidos al Savinelli de hoy, Giancarlo, quien ha retomado el camino de Achille Jr. Giancarlo está ahora al mando de la empresa y ha aportado nueva energía e ideas nuevas a Savinelli. Nipote del fondatore originale, Giancarlo svolge il delicato lavoro di modernizzare l'azienda mantenendo però intatta la sua eredità e tradizione La storia di dedizione alla qualità rimane quindi la filosofia Savinelli, che sta andando nel secondo secolo della sua esistenza semper guidata dalla stessa famiglia. Ahora al frente de la empresa, Giancarlo ha aportado nueva energía y nuevas ideas a Savinelli. Bisnieto del fundador original, Giancarlo está a cargo de la delicada tarea de modernizar la empresa, cuidar este patrimonio artesanal y transmitirlo intacto a su hijo Achille.