El fantástico y hoy olvidado Fernando Telletxea en su gran encarnación de Fama. Ex Greta y actor ocasional original de Renteria consiguió crear un personaje mucho más estimulante que el de su paisano Otxoa. Entre Pavlowski y el glamour ochentero y con canciones preciosas de Carlos Faraco (no en vano sonaba mucho en Tris Tras Tres). Su Tatuaje para La muerte de Mikel merece estar en cualquier antologia del cine español de aquella época.