Los 80s fueron una época de transición para Kiko Veneno. Su debut en solitario y una intentona por rescatar Veneno del impás; con el single ‘Si tú; si yo’; confirmaron que José María López Sanfeliú buscaba ampliar su vocabulario musical. Años más tarde; en 1987; llegaría Pequeño salvaje; antesala de su obra más reconocida; el consagrado Échate un cantecito.Pequeño salvaje es el segundo álbum en solitario del cantautor oriundo de Figueras y afincado en Sevilla; Kiko Veneno. Un disco heterogéneo; eminentemente rítmico; que no rinde cuentas ante ningún género o estilo musical. En su lugar; prefiere abrazarlos todos. Reggae; new wave y rumba se compenetran en una macedonia pop tremendamente atrevida. Arreglos de sintetizador y líneas de bajo funky empastan grácilmente con fraseos de guitarra flamenca y esa voz raspada y desvergonzada tan característica.El tono ocurrente y en apariencia insustancial de las letras de Kiko Veneno se consagra aquí como el motor que hace funcionar a esta colección de nueve canciones que engatusan y llenan de color el espacio. Pequeño salvaje es una pieza clave para entender la trayectoria posterior de un artista cuya obra musical sigue resultando a día de hoy igual de estimulante.