Gris Grimly, otro estudiante de las artes maléficas y maestro del terror gótico, siempre ha considerado Frankenstein como una de sus mayores influencias. A partir de los huesos y la carne del original, ha cortado y unido el texto de Mary Shelley con su propio arte creando algo totalmente nuevo: una sorprendente mezcla de lo clásico y lo contemporáneo, lo siniestro y lo seductor, lo horrible y lo desgarrador.