Érase una vez un leñador y una leñadora que tenían siete hijos y todos chicos. El mayor no tenía más de diez años y el menor no tenía más que siete. Puede sorprender que el leñador tuviera tantos hijos en tan poco tiempo; pero es que su mujer trabajaba a destajo y los hacía nada menos que de dos en dos.
Eran muy pobres y sus siete hijos los empobrecían más, porque ninguno de ellos podía ganarse la vida. También les afligía el hecho de que el menor era muy delicado y no decía palabra: tomaban por retraso mental lo que era una señal de la bondad de su alma.
Version Castellana de Joelle Eyheramonno y Emilio Pascual 2001
37x26 cm
PESO: 900 GR