Tras un divorcio devastador, Blanca Perea acepta una plaza en una universidad californiana para investigar la figura de un exiliado español olvidado. Lo que empieza como una vía de escape se transforma en un viaje de redescubrimiento personal, memoria histórica y reconciliación con el pasado. Dueñas teje una novela madura, cargada de sensibilidad y reflexión, donde el exilio, la identidad y los vínculos familiares se entrecruzan con elegancia.