1956. El general Erich Mielke, un alto mando de la Stasi, ha viajado hasta la Riviera francesa para obligar a Bernie Gun-ther a asesinar a una mujer. Es una misión suicida y Gunther lo sabe, así que huir es su única opción. Mientras escapa, el antiguo detective rememora otro caso: en 1939 fue enviado a Baviera a resolver un asesinato cometido en la segunda residencia de Hitler.