Barcelona 1980 Pomaire Rustica con solapas, 20x12 cms; 308 pags
Cuando los espectros deciden ser testigos de cargo.
La felicidad puede derretirse en un instante. Para Christa Spalding ese instante ocurrió cuando su hija Jenny apareció ahogada en un lago. Y ello no sólo fue el fin de la felicidad sino el comienzo de una nueva vida en que lo normal cedió el paso a lo espectral; lo conocido a lo desconocido; los seres amados se tornaron en amenazadores y las más inconmovibles convicciones fueron substituidas por inquietantes dudas.
La irrupción de lo sobrenatural en una existencia ordenada y segura; la aparición del crimen en un hogar alegre y despreocupado, son temas que William Katz trata con convincente maestría en esta última novela suya. Todos existimos al borde mismo del misterio, y todo esfuerzo es inútil cuando éste decide arrancarnos de nuestras efímeras seguridades.