Este libro es un diálogo entre la filosofía y la teología, una exploración racional y lúdica de los misterios cristianos desde una óptica contemporánea. Savater, laico y escéptico, contrapone su visión humanista al pensamiento creyente de Subirats, sin caer en el enfrentamiento dogmático. Lo que emerge es una conversación aguda, libre de solemnidades, donde la fe y la razón se miden con respeto y humor. Ideal para espíritus curiosos y mentes abiertas.