Don Carlos de Austria, hijo del rey Felipe II de España, tuvo una vida marcada por la tragedia y la controversia. Nacido en 1545, su vida estuvo llena de problemas de salud y conflictos políticos. Su comportamiento errático y su oposición a las políticas de su padre lo llevaron a ser visto como una amenaza para el reino.
En 1568, Don Carlos fue arrestado y encarcelado por orden de su propio padre. Murió en prisión a los 23 años, lo que alimentó rumores y leyendas sobre su muerte, incluyendo teorías de asesinato y conspiración1. Su trágico destino ha sido objeto de numerosos estudios y obras literarias, como el libro “El Trágico Destino de Don Carlos (1545-1568)” de Cesare Giardini