En San Sebastián poco después de terminar la guerra civil vive Pachi de origen gallego pero muy identificado con el género de vida de los vascos un hombre cazurro bohemio y filósofo a su manera es viudo y tiene un hijo a quien llaman Planicio por tener los pies planos. Pachi no tiene oficio ni beneficio juega muy bien a la pelota apuesta le gusta beber y raras veces tiene dinero por lo cual en el minúsculo sobreático donde vive con Planicio suele haber estrecheces económicas pero el buen talante del niño y la simpatía y la cordialidad del padre quitan todo aire sórdido a la situación. COLECCION PREMIO ATENEO 1976.