El gramil es una herramienta fundamental en la carpintería tradicional y otras labores de precisión. El gramil es una herramienta de medición y marcado utilizada desde tiempos antiguos, con orígenes que se remontan a la carpintería medieval y posiblemente incluso más atrás. Consiste en una barra de madera o metal con un bloque ajustable (llamado cabeza) y una punta de hierro (o cuchilla) que se utiliza para marcar líneas paralelas al borde de una pieza de madera. Durante siglos, fue una herramienta esencial para carpinteros, ebanistas y fabricantes de mobiliario, permitiendo realizar cortes y uniones con gran precisión. Los gramiles hechos completamente de madera fueron comunes hasta el siglo XIX e inicios del XX, cuando comenzaron a incorporarse metales más duraderos. Uso tradicional del gramil Marcar líneas paralelas: Ayuda a trazar líneas rectas y precisas, facilitando cortes o ranuras uniformes. Medición exacta: Es utilizado para marcar distancias repetidas a lo largo de una pieza de trabajo. Técnicas artesanales: Es clave en trabajos de carpintería manual, especialmente en tareas como la elaboración de ensambles o cortes de precisión.