Condizioni del lotto: Molto buono (nuovo o come nuovo, senza segni di utilizzo)
Espectacular cisne CASCABEL de porcelana Lladro años 70, tamaño 16 cm altox 12cm diametro.
Sobre el autor:
Antonio Ballester Vilaseca (Valencia, 18 de agosto de 1910-Alella, 9 de marzo de 2001), también conocido como Tonico Ballester, fue un escultor español.
Antonio era hijo del escultor imaginero Antonio Ballester Aparicio, hermano de la artista Manuela Ballester (y por tanto cuñado de Josep Renau). Con su mujer Ana María Bonilla tuvo tres hijos: el músico Antonio Ballester Bonilla, el pintor Jorge Ballester Bonilla y la escultura y profesora de arte Ana Rosa Ballester.
En 1963 Antonio se instala de nuevo en Valencia tras dieciocho años; el artista realizará el resto de su obra en Valencia.
Inicialmente se dedica a finalizar y ampliar varios de los encargos obtenidos en California (St. John's Seminary, Movieland Wax Museum) y a la realización de nuevos encargos, en particular un retablo de la Santa Cena en piedra artificial de doce metros de largo por dos de alto, para la St. Anthony's Church (Fresno, EE. UU.). Realiza también múltiples esculturas como Mujer Peinándose y Pareja Humana I (adquiridos por la Sala Misrachi).
A partir de los años 70 y tras la finalización de las grandes obras para EE. UU., el artista trabajará principalmente para sí mismo, produciendo numerosas obras de gran calidad, como los bronces "Vicente Blasco Ibañez", "Estatua Neoclásica", "Mujer Anaduza I y II" o "Los Diálogos (Homenaje a Lluis Vives)"
SOBRE LA PIEZA: Lladró es una empresa de figuras y productos de porcelana española con sede en la localidad de Tabernes Blanques, Valencia, España.La marca Lladró apareció por primera vez en 1953, cuando los hermanos Juan, José y Vicente Lladró empezaron a elaborar sus primeras piezas de cerámica y vidrio en un horno moruno construido en su casa familiar en Almácera (Valencia). En aquel momento los hermanos Lladró trabajaban por cuenta ajena en una fábrica de azulejos y vajillas. En 1958 trasladaron su empresa a una nave industrial en la población de Tabernes Blanques para poder hacer frente a la creciente demanda de sus piezas. Seguidamente, a partir de los años sesenta la empresa inició su expansión internacional, que la llevó a ser empresa de referencia en la cerámica de lujo. En 1965 Lladró exportaba parte de su producción a Canadá y empezó a introducirse en Estados Unidos. Durante los años 1970 se produjo un significativo incremento de los productos Lladró en el mercado norteamericano. También a mediados de los años setenta Lladró empezó a vender sus productos en Japón.
El éxito internacional llevó a la compañía a inaugurar, en 1988, el Museo y Galería Lladró de Nueva York. El renombre adquirido por las esculturas Lladró propició que en 1991 fuera expuesta una selección de las mismas en el Museo del Ermitage, en San Petersburgo. Desde entonces, dos piezas forman parte de la colección permanente de este museo: «Carroza siglo XVIII» y «Don Quijote». En 1992 Lladró estuvo presente en el Pabellón de Valencia en la Exposición Universal de Sevilla. En 1995 se inauguró el Centro Lladró en Madrid.
En 2003, la familia Lladró decidió dividir la sociedad. Las tres ramas de la familia, que se repartían la empresa al 33%, alcanzaron un acuerdo para repartirla. De esta manera, a finales de 2003 se constituyó un nuevo consejo de administración en el que cada uno de los tres hermanos fundadores estaba representado por dos de sus hijos: Juan Lladró por Rosa y Ángeles Lladró Sala; José Lladró por Mª Carmen y Mª José Lladró Castelló; y Vicente Lladró por Juan Vicente y David Lladró Roig. En 2007 Juan Lladró asume la propiedad del negocio en su mayor parte, junto a sus hijas Rosa y Ángeles.
Todas las piezas se elaboran en los talleres de La Ciudad de la Porcelana en Tabernes Blanques.
La pieza original se divide en fragmentos de los cuales se obtienen moldes. Estos moldes se rellenan con pasta líquida de porcelana, dando lugar a las partes que después se recomponen utilizando pasta de porcelana como adherente. Diferentes elementos ornamentales, como por ejemplo las flores, se añaden después a mano sobre la pieza recompuesta. A continuación las piezas se pintan a mano y se barnizan. Finalmente se cuecen durante alrededor de veinte horas y una vez salidas del horno se les aplican diversos procesos de control de calidad.
La empresa ha recibido en tres ocasiones el Premio Príncipe Felipe a la Excelencia Empresarial, en sus ediciones de 1993, 1997 y 2002.