Preciosa cruz de nácar de las realizadas en Jerusalén, como recuerdo del tour por Tierra Santa, que en ocasiones formaba parte del Grand Tour de las familias pudientes europeas a partir del S XVIII.
Las solían fabricar los monjes franciscanos, custodios de los Santos Lugares.
Estuvo desmontada desde antiguo dado el mal estado del soporte.
Se puso uno nuevo de madera de balsa que se protegió con un terciopelo antiguo.
Medidas :21,5 x 14.