Maravilloso frente de altar bordado en lana y sedas de colores con la técnica del tapiz. La iconografía del cordero sobre su cruz se encuentra centralizada con unos ángeles que abren una galería que le deja ver. Se trata de una pieza de colección del siglo XVIII. Su estado de conservación es bueno salvo marcas de pérdida en la cara de los ángeles (ver fotografías). La medida es de 2,10 por 62 cm de ancho.