Esta espectacular mesa de comedor ha sido hecha con un portón antiguo de madera maciza de roble de mediados del siglo XX. El tablero ha sido restaurado minuciosamente, donde se puede apreciar las vetas de la madera y el detalle de la mirilla, preservando toda su esencia. Se apoya sobre dos estructuras de madera, pintadas en color negro que le aportan un diseño actual y atemporal. Esta mesa de grandes dimensiones, tiene un acabado de resina epóxica transparente, que le añade resistencia y durabilidad a esta pieza.