Presenta un borde festoneado y ornamentación en relieve, lo que sugiere un diseño elegante o antiguo.
La decoración central parece ser una pintura esmaltada o un calcomanía con un motivo naturalista, posiblemente una escena de paisaje con tonos marrones y verdes.
El acabado tiene un brillo iridiscente o nacarado, lo que realza su función como pieza decorativa más que utilitaria.