Este coche de juguete es una réplica detallada de un Ferrari clásico de Fórmula 1. Con su característico color rojo y el número 4 en la parte frontal y lateral, captura la esencia de la velocidad y el espíritu de competición. El piloto, con su traje amarillo y casco negro, añade realismo a este modelo de colección. Las ruedas robustas y su diseño aerodinámico lo convierten en una pieza imprescindible para los amantes del automovilismo y los coleccionistas de juguetes.