El jabalí ya era un animal sagrado entre los antiguos germanos. También era un símbolo de prosperidad, riqueza y fertilidad. Con los griegos y los romanos, alguien obtenía privilegios si tenía muchos cerdos (y también otros animales) a su disposición. La tradición más conocida en Alemania no es "matar" un cerdo de verdad, sino uno hecho de mazapán en Nochevieja. A menudo, el cerdo es montado por un deshollinador y tiene una moneda de la suerte o un trébol de cuatro hojas en la boca. En la Edad Media, a menudo se entregaba un cerdo como premio de consolación a alguien que quedaba último en una competencia. De ahí viene la expresión “to have swine” (haber tenido suerte). No se sabe si alguna vez ha conducido una locomotora con forma de cerdo; Es muy poco probable. Se conoce un tranvía con forma de alcancía. El modelo 30455 de Märklin se fabricó una vez en 1999. El embalaje es una caja de hojalata con un ajuste de espuma suave en el interior. La locomotora viene con un pedestal con una pieza de rieles K. En la caja hay un trébol de cuatro hojas, un deshollinador, una herradura, una mariquita, un agárico de mosca y al fondo un cerdo. Todos estos son símbolos de la suerte. El marco (base) está hecho de metal. El cerdo está hecho de un plástico blando. El cerdo está muy bien detallado y tiene ojos pintados a mano y una cola rizada. Nueva, sin salir de la caja.