Time to Say Goodbye es un álbum de Sarah Brightman en colaboración con la London Symphony Orchestra, lanzado en 1997. Este álbum combina elementos de música clásica y pop, creando un estilo único que ha cautivado a audiencias de todo el mundo. Incluye canciones en inglés y otros idiomas, mostrando la versatilidad vocal de Brightman. Es una colección de canciones emotivas y poderosas, ideal para los amantes de la música clásica y pop.