“Andaré por un camino ancho”. Comentarios a los textos litúrgicos del Ciclo “C”. Javier Gafo. Ediciones Mensajero. Primera edición. 1991.La «profesión» sacerdotal tiene el peligro de convertirse en un profesionalismo, pero también obliga a plantearse las vivencias que uno tiene que trasmitir. Muchas veces no es fácil predicar porque uno siente que su vida no corre paralela con aquello que tenemos que trasmitir. Frecuentemente uno se siente incapaz e indigno de transmitir la palabra de Dios que se nos ha encomendado. He escogido como título de estos comentarios «Andaré por un camino ancho» (Salmo 119,45). Jesús habla de senda y de puerta estrechas. Pero también puede hablar de «camino ancho» con fidelidad al Evangelio. Porque Jesús nos revela un Dios que tiene entrañas de misericordia y de perdón, que respeta la libertad del hombre y no le abruma con normas y preceptos. Su camino es sin duda exigente, pero también liberador. He escogido también este título porque he intentado en mi predicación dialogarcon los problemas de nuestro tiempo; no encerrarme en las discusiones eclesiales, sino salir a los caminos anchos de un mundo cargado de interrogantes.