John Cheever traz ̤en sus cartas, durante aǫs y sin saberlo apenas, un autorretrato tan revelador como el que esconden sus cuentos y sus novelas. Prolf̕ico en su correspondencia privada, poda̕ llegar a escribir una treintena de veces por semana o amigos, a otros escritores como Philip Roth, John Updike o Saul Bellow,as ̕como a familiares y amantes