En el verano de 1953, en la pequeña ciudad de Gravesend, New Hampshire, John Wheelwright, de once años, y su mejor amigo, Owen Meany, están jugando en un partido de béisbol de la Little League. Cuando Owen golpea una falta que mata a la madre de John, sus vidas cambian en un instante. Se considera un trágico accidente, pero Owen no está de acuerdo. Él cree que es el instrumento de Dios, puesto en la Tierra para un propósito superior. Y a medida que los chicos llegan a la edad adulta con el telón de fondo de la guerra de Vietnam, una serie de acontecimientos notables demuestran que tal vez el plan divino de Owen no fue imaginado después de todo.