En la primavera de 1938, Elise Landau llega a Tyneford House, una finca en la costa sur de Inglaterra. La joven judía de una familia adinerada espera aquí un puesto como empleada doméstica. Tuvo que dejar atrás a sus padres y a su hermana en Viena. Elise no sabe nada de Inglaterra, solo que no le gustará allí. Pero valientemente pule la plata y sirve bebidas, con el collar de perlas de su madre debajo del delantal. El único rayo de esperanza: Kit, el hijo del dueño de la casa. Con él experimenta su primer amor tierno, un amor contra las convenciones. Entonces la guerra llega a la apacible Dorset y evoca acontecimientos que cambian Tyneford House y sus habitantes para siempre. Elise se da cuenta de que no tiene otra opción que dejar atrás su antigua vida por completo. Una conmovedora y maravillosamente romántica elegía a un mundo perdido.