En el año 47 d.C., Pompeya se ve sacudida por una serie de brutales asesinatos de prostitutas. Entre las víctimas se encuentra Fortunata, una antigua favorita del emperador Claudio. El emperador, consternado, envía al senador Publio Aurelio Stazio a investigar. Al llegar a Pompeya, Publio Aurelio descubre que Fortunata es solo la última de una serie de mujeres asesinadas por un despiadado asesino en serie. La investigación lleva a Publio Aurelio a desentrañar una red de secretos y conspiraciones en la ciudad.