En el Berlín de los años treinta, la ciudad nocturna centellea con anuncios de neón y vibra con el jazz importado que resuena en diez mil cabarets. Uno de ellos, el Klub Kaukasus, es considerado el cabaret más representativo de la esencia berlinesa. Desde su escondite durante la ocupación nazi, Daniel Saporta recuerda sus días como propietario de un cabaret español, acogiendo tanto a berlineses en busca de placer como a oficiales nazis de alto rango. Una inolvidable imagen novelesca del Berlín nazi, con sus placeres, perversiones y tragedias.