En este encantador álbum ilustrado, acompañamos al protagonista en la tarea de educar al monstruo de su armario. El monstruo siempre está haciendo travesuras, y enseñarle a lavarse los dientes, peinarse, no tocar los enchufes y no decir palabrotas resulta ser un gran desafío. A través de ilustraciones delicadas y un toque de humor, este relato aborda cómo los niños crecen y aprenden a asumir responsabilidades cotidianas, como ordenar la habitación y mantener la higiene personal. Una historia divertida y educativa para los más pequeños.