Este libro de Andrés Sorel, publicado en 1993, ofrece un análisis profundo de la revolución cubana y su impacto en la sociedad. A través de un ensayo reflexivo, Sorel examina las complejidades políticas y sociales de Cuba desde 1959, explorando temas como las relaciones entre el Estado y la Iglesia, y las condiciones económicas y sociales de la isla. El autor invita a la reflexión sobre el futuro de la revolución y su significado para América Latina.