Este libro explora el papel de los agentes de propaganda de Stalin y cómo manipularon a los intelectuales occidentales. Ernest Hemingway, Lillian Hellman, Andre Malraux, Maxim Gorky y Andre Gide fueron algunos de los grandes escritores que fueron objeto de la propaganda soviética. El libro describe el papel clave desempeñado por Willi Munzenberg en el reclutamiento y la manipulación de estos intelectuales.