Abby Freeman está emocionada con su nuevo trabajo como presentadora de televisión y necesita entrevistar al famoso periodista Max Harding para impulsar su programa. Max acepta, pero solo en privado, lo que pone a Abby en un dilema: arriesgarse a perder su inocencia para obtener la historia de su vida. Max no se da cuenta de que Abby sigue siendo virgen, lo que complica aún más la situación.