Blanca emprende un viaje introspectivo a lo largo del Camino de Santiago en un momento de su vida marcado por el estrés laboral y una crisis personal. A través de cada paso, la protagonista se reconecta consigo misma y encuentra la claridad que necesita para seguir adelante. Este libro invita a la reflexión sobre la importancia de detenerse y escuchar las señales internas que guían nuestro crecimiento personal.