En este libro, Josep Maria Espinàs ofrece una colección de observaciones y reflexiones sobre la vida, tanto la de la sociedad como la suya propia. Con una prosa precisa y una calma luminosa, el autor comparte su visión personal y aguda, a menudo con un toque irónico, que lo define como uno de los escritores más coherentes de su tiempo. Este libro es una continuación de su línea autobiográfica, consolidando su autoretrato literario y ofreciendo a los lectores una experiencia llena de humanidad y sabiduría.