Este libro analiza la transformación de la sociedad catalana debido a la llegada de inmigrantes y su impacto en las escuelas. Examina cómo el sistema educativo se ha adaptado para abordar las necesidades de los estudiantes recién llegados, el clima en las aulas multiculturales y las metodologías utilizadas para fomentar la interculturalidad. A través de la voz de profesionales de la enseñanza y la observación en las aulas, se reflexiona sobre los problemas que rodean a estos estudiantes y el tratamiento de la multiculturalidad en Cataluña.