Este libro explora la obra de Vassily Kandinsky, uno de los fundadores del arte abstracto. A través de un lenguaje claro y accesible, la monografía introduce a jóvenes lectores al mundo del arte abstracto, mostrando cómo Kandinsky renunció a representar la realidad para expresar emociones y la vida interior a través de formas y colores. El libro destaca cómo la pintura de Kandinsky se convierte en un lenguaje de sensibilidad, donde todo es posible y el arte gana una libertad absoluta.