La caída de Constantinopla, escrita por Steven Runciman, narra la pérdida del imperio bizantino a manos de los cristianos y la posterior conquista de la ciudad por los turcos, marcando un evento catastrófico en 1453. Este relato histórico ha influido tanto a historiadores como a novelistas, describiendo la heroica resistencia y el impacto de la caída en el mundo de la época.