En el siglo III d.C., el Imperio Romano se encuentra en una profunda crisis, marcada por violentos movimientos sociales, políticos y religiosos. En este contexto, Félix, un joven lusitano, emprende un viaje en busca del sentido de su vida, recorriendo gran parte del Imperio. La corrupción en la capital lo golpea, pero encuentra consuelo en un templo gnóstico. Desde los campos de batalla hasta la corte persa, su vida heroica lo lleva a conocer a importantes filósofos y pensadores de la época. Esta novela histórica de Jesús Sánchez Adalid nos transporta a un mundo de febril agitación y búsqueda espiritual.