La protagonista, Titahija, es la hija pequeña de una familia de exiliados rusos refugiados en Lorena. Con tan solo seis meses, sobrevive a un accidente automovilístico en el que su madre pierde la vida, quedando su rostro marcado por una cicatriz. Tita lucha contra su destino trágico, intentando romper el encantamiento que pesa sobre su familia. Sus amores son dolorosos y complicados, y aunque el matrimonio o un hijo podrían salvarla, parece que esa maldición se ha convertido en su razón de vivir.