Lindsay Douglas solo necesitó una semana para enamorarse del carismático y orgulloso griego Antonios Marakaios. Sin embargo, su matrimonio se vio afectado por la presión y la soledad, lo que la llevó a marcharse. Meses después, Antonios le pide que asista a una celebración familiar en su país a cambio del divorcio. La voz de Antonios la sigue estremeciendo y le recuerda la fuerza de su deseo. ¿Volverá a enamorarse de él? ¿Bastará otra vez una semana para ello?