En el corazón del siglo XIII, Djamil, el futuro sultán de Kazarkhan, es un joven príncipe con inclinaciones artísticas y una marcada preferencia por los hombres. Ajeno a las intrigas políticas y bélicas, y reacio a cumplir con la tradición de desflorar a una virgen en su decimosexto cumpleaños, delega esta tarea a su paje, Selim. Esta decisión desencadena una serie de eventos que cambiarán el destino de ambos jóvenes y de Dalia, la joven destinada al ritual, quien huye de un matrimonio forzado y se enamora de Selim. La revelación de que el hijo que espera no es del príncipe podría sellar el destino fatal de los tres. En un contexto de ambiciones y luchas por el poder, la llegada al trono de un príncipe tan poco convencional no es bien vista por todos. Nicolas Henri nos transporta a un Oriente mítico y sensual, evocando las atmósferas de Las mil y una noches.