En una noche de invierno, Benjamin y su prometida Hélène se refugian en el chalet de Steiner, un abogado de aspecto atractivo, y su esposa Francesca. Son recibidos con hospitalidad, pero pronto un veneno se mezcla con el encanto. Benjamin descubre que estas personas, descalificadas por la edad, castigan a aquellos cuya belleza consideran una ofensa. Hélène se convierte en una víctima expiatoria, mientras que Benjamin se pregunta si esta pareja monstruosa le está mostrando un espejo. Esta novela policíaca y cuento fantástico, a la vez suave y cruel, le valió a Pascal Bruckner el premio Renaudot en 1997. La obra explora las trampas del culto a la apariencia y critica las tentaciones de la juventud eterna.