En su debut novelístico, Ali Smith explora las conexiones entre personas, las atracciones y las repercusiones fantasmales. La novela teje conexiones entre culturas, países, familias, amigos y amantes. Es una obra sutil y compleja que desafía las expectativas sobre la ficción y las verdades, con una gracia poética que ilumina las tensiones entre la esperanza y el deseo, entre el pasado y el presente.