Mickey Gibson, una madre soltera y exinspectora, lleva una vida ajetreada mientras trabaja desde casa para ProEye, una empresa de investigación global. Un día, recibe una llamada de una colega pidiéndole que inventaríe una casa vacía perteneciente a un traficante de armas. Al llegar, descubre un cadáver en una habitación secreta y se da cuenta de que nada es lo que parece. Pronto se convierte en la principal sospechosa de una investigación de asesinato y debe demostrar su inocencia mientras se enfrenta a una mujer misteriosa y letal.