En 'La guardiana de mi hermana', Anna Fitzgerald se enfrenta a una decisión desgarradora. Concebida para ser la donante perfecta para su hermana Kate, quien lucha contra la leucemia, Anna ha vivido toda su vida bajo la sombra de la enfermedad de Kate. Después de años de procedimientos médicos, Anna se niega a donar un riñón, lo que lleva a una batalla legal por el control de su propio cuerpo. Esta novela explora los límites del amor familiar, el sacrificio y las complejidades éticas de la medicina, planteando preguntas difíciles sobre la autonomía y el derecho a decidir sobre el propio cuerpo.