En su incisivo ensayo, Georges Corm explora la arraigada hostilidad entre Oriente y Occidente, revelando cómo esta 'fractura imaginaria' oculta intereses de poder. Desde los clichés del siglo XIX sobre un Oriente místico y un Occidente racionalista, hasta la laicidad occidental influenciada por valores religiosos y teorías raciales, Corm desentraña cómo los eventos del 11 de septiembre y el conflicto israelo-palestino han solidificado peligrosamente el pensamiento crítico. El autor aboga por un discurso político occidental que abandone arquetipos bíblicos y narcisistas, promoviendo una reflexión más profunda sobre las relaciones interculturales y geopolíticas.