Néstor es un niño que vive la vida a su propio ritmo, disfrutando de cada momento con calma. Sin embargo, las personas a su alrededor no comprenden su lentitud y lo presionan constantemente para que se apresure. Esta presión lo transforma en un niño triste y apagado, hasta que descubre que cada cosa en la vida tiene su propio tiempo y valor. Un cuento infantil que invita a la reflexión sobre el respeto a los ritmos individuales y la importancia de la paciencia.