En este libro, John Anderson explora la relación entre la libertad religiosa y los procesos políticos en sociedades en transición. Analiza cómo las élites religiosas y políticas buscan definir sus roles en el nuevo orden, y cómo se utiliza el privilegio y la discriminación en estos contextos. El autor examina varios países del sur y este de Europa para ilustrar la creación de una mentalidad democrática en estas sociedades.